A partir de las 00: 00h se extremará el silencio en dependencias y dormitorios. Todos los usuarios velarán para que haya un clima de silencio por los pasillos, dormitorios y salas comunes, por respeto a los compañeros y con beneficio de todos. Se evitarán los gritos, portazos, los disturbios y el volumen excesivo de los aparatos y todo aquello que pueda perturbar el ambiente de tranquilidad a cualquier hora del día, y especialmente, por la noche.
No está permitida la tenencia, venta, consumo de alcohol y tabaco dentro del albergue, tanto en el espacio interior del edificio, como en el exterior.
A la llegada a la instalación se entregará al usuario un juego de llaves de la habitación. El usuario deberá abonar 10 euros de fianza que le será devuelta al finalizar la estancia. En caso de pérdida de las llaves no se devolverán los 10 euros.
Es obligatorio utilizar las papeleras existentes en las habitaciones, salas y pasillos para depositar los residuos. Se debe respetar y cuidar las instalaciones y equipamientos.
Por razones de seguridad no está permitido encender velas o cualquier otra cosa que haga llama.
No está permitido comer ni beber en las habitaciones.
El albergue no se hace responsable de posibles robos dentro de las habitaciones.
No está permitido tirar desde ventanas, azoteas, tejados o escaleras interiores y exteriores, objetos o sustancias de ninguna clase. No se permitirán en ningún caso comportamientos incívicos.
Los desperfectos causados por malicia o negligencia en habitaciones, dependencias o material de uso comunitario deberán ser abonados por el causante. Al ser las habitaciones de uso exclusivo de sus usuarios, estos serán los responsables directos de todos los muebles y enseres que contengan.
La dirección podrá expulsar del albergue aquellas personas que incumplan las normas generales de régimen interno y las pautas de comportamiento expuestas anteriormente.